Sean “Diddy” Combs fue sentenciado a cuatro años de prisión el viernes tras ser declarado culpable de dos cargos de transporte con fines de prostitución.
La sentencia se dictó en un tribunal federal, donde Combs presentó una petición personal al juez, disculpándose por su comportamiento y expresando su arrepentimiento.
A pesar de su petición y de los argumentos de la defensa, el juez impuso la sentencia, alegando preocupación por la aceptación de responsabilidad por parte de Combs.
Los hijos de Combs también hablaron en el tribunal, y Jessi Combs, entre lágrimas, pidió al juez que considerara a su padre como un hombre renovado que merece una segunda oportunidad.
La defensa presentó un video que muestra a Combs interactuando con sus hijos, con el objetivo de demostrar su compromiso con el cambio y la rehabilitación. Sin embargo, el juez no quedó convencido de la plena aceptación de la responsabilidad de Combs por sus actos.
La fiscalía destacó la gravedad de los cargos, enfatizando que el caso no solo involucraba prostitución, sino también acusaciones de violencia contra la exnovia de Combs, Cassie Ventura, y otra mujer que testificó bajo el seudónimo de Jane.
Además de la pena de prisión, Combs fue condenado a cinco años de libertad supervisada y a pagar una multa de 500.000 dólares. Se le computará el tiempo que ya ha pasado en prisión.